TARTA DE UVAS Y QUESO CON GELATINA DE ZUMO DE UVA





En casa ya había montones de racimos de uva, y recordé una tarta que había visto con las uvas enteras que había llamado mi atención, éste era el momento ideal para hacerla, la receta original es de Maria Lunarillos, el único cambio que he hecho es cambiar el moscatel, por zumo de uvas natural.
Es una tarta muy sencilla de preparar, casi todo lo hizo mi hija de 7 años, mi pinche preferida y de presentación espectacular, además como dice el dicho popular: “uvas y queso saben a beso” , así que ya sabéis a probarla que os gustará, seguro!!

Ingredientes para un molde de 18-20 cm.
Para la base de galletas:
150 g de galletas digestive de avena
60 g mantequilla a temperatura ambiente
Para la crema de queso con uvas:
500 g de queso crema (tipo Philadelphia)
250 de chocolate blanco
250 g de leche entera
40 g de azúcar
1 sobre de cuajada
Uvas negras y blancas sin pepitas.
Para la gelatina de uva:
70 g de azúcar
70 g de agua
70 g de zumo de uva
3 hojas de gelatina

ELABORACIÓN
Para la base de galletas:
Triturar las galletas hasta hacerlas polvo y mezclar bien con la mantequilla.
En Thermomix: pulverizamos las galletas 10 segundos en velocidad 10, añadimos la mantequilla y programamos 10 segundos en velocidad 5.
Se extiende homogéneamente sobre la base de un molde desmontable y se reserva en el frigorífico.


Para la crema de queso con uvas:
Se derrite el chocolate y se mezcla con la leche, la cuajada, el queso y el azúcar, y se bate bien. Se pone en un cazo, y sin dejar de remover se lleva a ebullición. En cuanto empiece a hervir, se retira del fuego.
En Thermomix:  Ponemos todos los ingredientes en el vaso y se programa 7 minutos, 90º, velocidad 5.
Se vierte sobre la base de galletas, colocamos las uvas inmediatamente  sobre la crema.
Se deja enfriar en la nevera durante una hora.



Para la gelatina de moscatel:
Hidratamos las hojas de gelatina en agua fría.
Ponemos en un cazo al fuego el azúcar y el agua, llevamos a ebullición y  dejamos hervir unos minutos, hasta que obtener un ligero almíbar.
Retiramos del fuego y añadimos el zumo y la gelatina, removemos hasta su completa disolución.
Dejamos templar y luego  vertemos con delicadeza sobre las uvas.
Dejamos cuajar en el frigorífico durante un par de horas.